Mira… ! Lo mejor que puedes hacer es empezar el día meditando en Prov. 6:11.
“Así vendrá tu necesidad como caminante, y tu pobreza como hombre armado.”
Las cosas en el mundo de la Internet acontecen con una velocidad extraordinaria. Un site como el "Google" que comenzó apenas hace siete años, facturó en el año 2005 unos 6 mil millones de dólares. Es dinero que deja confuso a cualquier mortal.
En un mundo cada vez más globalizado es imposible quedar parado. Permanecer en la inercia o moverse como si aun estuviéramos viviendo la euforia del descubrimiento de la rueda, puede ser fatal.
¿Cómo andar en carreta cuando existe un tren bala? ¿Cómo enviar los mensajes por barco si con un clic del ratón la noticia puede dar la vuelta al mundo?
El proverbio de hoy tiene como propósito despertar a las personas que bajo el argumento de estar "esperando en el Señor", se quedan de brazos cruzados mientras la caravana de los vencedores avanza.
La pobreza y la necesidad no pueden nunca ser características del cristiano. La humildad y la sencillez, sí. La mediocridad y el conformismo, jamás. El trabajo es un don divino, dado al ser humano antes de la existencia del pecado. La ocupación sería una bendición. Una vida de ocio no tendría sentido. Después de la entrada del pecado, el trabajo pasó a ser un elemento terapéutico. Es verdad que el cansancio y la fatiga harían que la criatura huyera naturalmente del esfuerzo, pero el trabajo todavía continuaría siendo el mayor instrumento formativo y restaurador.
No hagas del trabajo apenas una herramienta para ganar dinero. Haz de él un acto de servicio. El dinero no satisface. El servicio realiza, y la consecuencia es el dinero.
La persona que se entrega a una vida de inactividad verá que, tarde o temprano, la pobreza aparecerá en su vida como un ladrón, agazapada, lenta, pero inevitable. No hay cómo huir de esa realidad.
Haz de este día un día de realizaciones. El mundo gira y si tú no acompañas su movimiento, con certeza quedarás atrás. Dialoga con Jesús. Pon tus planes y proyectos en las manos de Aquel que no conoce la derrota y ve a la lucha. No te quedes parado, porque si lo haces "vendrá tu necesidad como caminante, y tu pobreza como hombre armado".
Alejandro Bullon
por: ministeriobullon.com